lunes, 30 de julio de 2012

Beneficios de Caminar


“VENEFICIOS DE CAMINAR”




Por: Lic. Mario Alexis Ayala P.











Regular mente cuando salgo a correr por las mañanas observo a varias personas de edad avanzadas y con algún tipo de obesidad, que Handan caminando por lo en este ocasión les quiero hablar sobre los beneficios de caminar.



Caminar es un ejercicio de tipo aeróbico, es decir, que hace latir el corazón más rápido, fortaleciéndolo además de ser una actividad física muy relajante para las mayorías de las personas.

Caminando se puede obtener una buena forma física, similar a la que se puede alcanzar nadando o haciendo bicicleta.

Aunque con otros ejercicios se puede conseguir más fuerza y resistencia, caminar es un actividad física sencilla, barata y que se puede practicar en compañía, algo que le da una dimensión social muy valorada por algunas personas (el sículo de amistades crece cuando se camina al igual que su bienestar      físico y          mental). 

Además, es un buen aliado para controlar el peso, pues caminando se queman calorías. Una persona de 75 kg que camine rápido durante 10 minutos cada día y durante un kilómetro, gasta de 550 a 800  calorías al día, es decir, lo que proporciona una comida.

(Esto puede variar de persona a persona por una gran cantidad de factores; edad, grupo étnico, genética, estilo de vida etc.)

Para sacarle el mayor partido, le recomiendo practicar este ejercicio unas 3 ó 4 veces a la semana, entre 30 minutos y una hora, con una intensidad moderada. 

Otros beneficio de caminar es que aumenta la flexibilidad de las piernas y activa su flujo sanguíneo, de forma que previene la aparición de varices. También refuerza los huesos, así que puede ayudar a prevenir fracturas. Y resulta una práctica muy beneficiosa a nivel psicológico, pues se libera tensión, reduce el estrés y genera un gran bienestar.
 

Como en la práctica de todo deporte, hay algunas recomendaciones que merece la pena tener en cuenta: evitar caminar durante las horas de máximo sol, llevar ropa y calzado cómodos y que no aprieten, beber agua y, sobre todo, no tener prisa y tener una dieta donde se previleje el consumo de frutas, verduras  y frutos secos sobre otro grupo de comida.

A demás que puede preguntarle a su médico sobre la posibilidad de ir disminuyendo paulatinamente los medicamentos especialmente la relacionada  a la especialidad médica de neurología y los vinculados al sistema circulatorio.



San Salvador 31 de Junio de 2012

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